Nadie la echará tanto de menos.

Que sí, que conozco sus sonrisas de "que le den al mundo que hoy soy feliz".
Y me se de memoria los hoyuelos que le salen en las mejillas y su forma de ver las cosas.
Que he recorrido mil veces su cuerpo en busca de lunares nuevos, y me se con los ojos cerrados dónde me dejó la marca de sus besos. Que no hay cielo que se compare con sus ojos y el sol podría salir con que solo respirara. Que se las locuras que pasan por mi mente cuando sus pestañas chocan con las mias y se que si sus manos se vendieran yo sería la mejor postora aunque se vendieran caras. Que todo lo que le rodea es sencillo, que tiene un corazón complicado y por eso a veces es tan fácil enamorarse de sus palabras
A veces, una mirada te dejará sin aire, hasta que un beso te devuelva la respiración, e incluso haga brotar una sonrisa.
En otras ocasiones, serán las lágrimas las que hagan acto de presencia, y parezcan querer ahogarte entre suspiros, pero no te dejes. En esta vida hay tiempo para todo, y, créeme, incluso en los días nublados se puede sonreír.
La vida está basada en contradicciones, en sorpresas. Cuando menos lo esperes, algo hará de un día perfecto el peor, y viceversa. Así que lo mejor, sin duda, es dejarse sorprender por todo lo que el destino nos tenga preparado.
Déjate coger de la mano y convéncete a ti misma de que eres lo mejor que tienes. Al fin y al cabo, las personas, los amigos, las sensaciones van y vienen, pero tú siempre serás lo primero y lo único que vas a tener en todo momento a tu lado.
Sonríe, muerde, crece, baila, canta, besa, llora, ríe, quiérete y déjate querer... Haz lo que quieras, lo que sientas, como un niño pequeño que no se conforma con el papel y decide pintar en la pared.
No tengas miedo, no pienses, actúa.